GOLPE DE MANO DETERMINANTE EN LA NEGOCIACIÓN

El pasado viernes 27 de abril, tras la reunión de la RPT, tuvo lugar un hecho gravísimo que para UGT supone no ya un riesgo, sino probablemente un punto sin retorno en el inicio de la descomposición de la unidad sindical que tanto se nos reclama a todas las partes y por la que tantos sapos estamos tragando y que no vamos a enumerar.

Nos referimos a la aprobación de un reglamento que regula el funcionamiento de la Mesa General de Negociación, para la cual se obvió la representatividad que nos dieron las urnas democráticamente. En esta sesión so votó a favor por la empresa y por CGT y SIP y la abstención de ATMJ, entre otras cosas, que la proporción de representatividad que ostentamos no cuente en la adopción de acuerdos, llegando incluso a votar para eliminar el derecho a nuestro propio asesor, ya que entre SIP y CGT tienen la potestad de elegir a un solo asesor para 6 sindicatos. También, a instancias de CGT, se eliminó del borrador del reglamento la obligatoriedad de publicación de las actas de negociación en la intranet municipal, por tanto se pierde enormemente en la transparencia a la que la plantilla municipal tiene derecho.

Al arbitrio de la parte social quedaron temas como la presencia de en la mesa de CSIF y CTP,  la publicación en intranet de las actas de negociación, la asesoría de cada sindicatos o el respeto al resultado electoral, y en cada uno de esos temas hubo unanimidad entre empresa, CGT y el SIP.

Con esto, una vez eliminada la presencia de CTP, se nos rebaja nuestra presencia y la de otros sindicatos como  CC.OO., haciendo más cómoda la adopción de acuerdos, tanto de RPT, de Convenio, del Reglamento Económico Especial de la Policía, como del Reglamento de Productividades y en el ERE municipal.

En todas estas negociaciones, como sucede con otros sindicatos, hemos quedado en la práctica como meros espectadores, que limita nuestra acción a la mera propuesta y a la información de lo que acontece, herramientas que aprovecharemos al máximo en beneficio de la plantilla.

Obviamente la empresa actúa según conviene al equipo de gobierno, y esto es lo preocupante, que parece convenirle una mayoría ficticia compuesta por CGT y SIP, quienes no han tenido empacho en limitar la capacidad de acción del resto de sindicatos.

El escenario que se ha configurado por estos tres actores es el idóneo para que tenga lugar una merienda de negros, solo el tiempo nos dirá si son esos los derroteros por los que vamos a transitar mientras sufrimos el rodillo conjunto de la empresa y estos sindicatos, bajo cuya exclusiva responsabilidad quedará lo que ocurra en el futuro.