“Cuando los
nazis vinieron a buscar a los comunistas,
guardé silencio, porque yo no era
comunista,
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio, porque yo no era
socialdemócrata,
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté, porque yo no era
sindicalista,
Cuando vinieron a buscar a los judíos,
no protesté, porque yo no era judío,
Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.”
Este poema, atribuido erróneamente a Bertolt Brecht, es parte
de un sermón de Martin Niemöller en la semana santa de 1946, tras la II Guerra
Mundial y trata de hacer reflexionar a los alemanes sobre las barbaries
cometidas por el III Reich, explicando de una forma muy gráfica como destruir lo colectivo usando el individualismo.
Salvando las distancias, en esencia, estamos asistiendo a un
escenario parecido, donde mientras se lincha a los que antaño eran punta de
lanza en la conquista de derechos laborales y que hoy son un mal ejemplo para
el modelo chino que parecen querer implantar “los mercados” en toda Europa.
Poca gente parece caer en la cuenta de que tras el
apedreamiento de las plantillas públicas se esconde también el recorte de
servicios que reportan bienestar al 99% de la población.
Pocos caen en la cuenta de que tras limitar cada vez más los
ingresos de este colectivo se esconde una severa caída del consumo que
dificulta enormemente la recuperación, empinando aun más la cuesta por la que
transitan tanto el resto de trabajadores y trabajadoras como los autónomos y
pequeñas empresas, lo cual nos lleva a dificultar aun más si cabe la creación
de empleo y terminar de hundir más la expectativas de esos millones de parados.
Dicho de otra forma afecta al 99% de la población de forma directa e indirecta.
¿Alguien piensa que se trata de una reflexión interesada? Veamos
lo que está sucediendo en Europa. La mayoría de los países están sufriendo
severos recortes en el gasto público, unos más que otros, donde los recortes
son más graves la situación del país se vuelve más difícil. Tenemos el ejemplo de Bélgica, donde la situación política no ha permitido que se pudiesen
tomar las medidas de ajuste que se imponían curiosamente desde Bruselas. ¿Se ha
ido Bélgica al traste? Lejos de eso mientras en la zona euro se crece al
1,6% en Bélgica crecen al 2,4%. Parece que este ejemplo es bastante
clarificador.
El escenario de recortes de lo público tiene muchos planos y
lo estamos viendo a nivel nacional, y con una virulencia inusitada en algunas
comunidades autónomas, pero en toda la geografía española lo vemos muy de cerca en
nuestros ayuntamientos, el primer escenario del uso de la motosierra.
Por esta razón, hoy, 1º de octubre, más de 20.000 empleados y
empleadas municipales, venidos desde todas las provincias andaluzas, hemos
salido a protestar por las calles de Sevilla. Desde la clara conciencia de lo
que está en juego, que no solamente es nuestro estado de bienestar, es el de
todos y todas.
Defendemos lo público,
tanto el empleo como el servicio, porque no podemos ser los trabajadores y
trabajadoras y la ciudadanía en general los que siempre paguemos los platos
rotos.
Si quieres más información sobre la movilización de hoy, visita el blog de Manuel Pastrana y el de los compañeros de la Sección Sindical del Ayuntamiento de Algeciras.
Y recuerda que el próximo jueves día 6 de octubre, en la Plaza de San Antonio de Cádiz, a las 19.00 horas nos vemos para reivindicar el empleo, contra la destrucción de los derechos laborales y sociales.
NO TE SOMETAS ¡MOVILIZATE!
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